Ayer se casó mi mejor amiga Vipi con Her, quien es su novio desde los 17 años (hoy tienen 34). Su fecha original era nov del 2020, pero vino la pandemia. No dejaron que la incertidumbre los amedrentara y casi un año después volvieron a apostar por la fiesta y por su amor.
Un día hace unos meses me desperté pensando en unas palabras para ellos que me salían por los dedos. Las escribí. Le dije a Vipi que había escrito algo, que no sabía si se podía hablar, pero que si no se las daba a ellos. Me dijo «obviamente vos vas a ser testigo, y todos los testigos pueden hablar» Emoción pura.
Ayer con el viento y la urgencia terminé diciéndolas de memoria y mirándolos a los ojos, sin el machete de las letras. Acá están mis palabras completas:
«Nadie sabe explicar exactamente por qué nos enamoramos cuando nos enamoramos. Fui testigo de ese momento en Italia en que sus mentes y sus corazones hicieron un click. Cuando les cayó la ficha de que podían ser más que compañeros de clase. Podían ser compañeros de vida.
Pero si bien para el «por qué nos enamoramos» no hay respuesta para el «cómo hacer para que el amor crezca y se enriquezca» hay muchas, y ustedes las tienen todas. Desde muy chiquitos supieron acompañarse en sus decisiones, enraizarse en sus familias, tener sus espacios con sus amigos y sus espacios propios. Tuvieron 18 cuando había que tener 18, 25 cuando había que tener 25, 30 cuando había que tener 30. Crecieron juntos sin que ninguno de los dos apagara la voz del otro. Sin quemar etapas. Sin dejar de buscar el propio camino. Y así y todo, aunque siempre fueron dos personas que crecían libres, se las rebuscaron para aprender a sincronizar sus pasos y realmente caminar a la par.
Pasaron juntos duelos, alegrías, satisfacciones, frustraciones, hasta llegar a los grandes logros de los que disfrutan hoy. ¡Pasaron una pandemia, que no es poco! Y la incertidumbre de no saber si esta, la noche más esperada, la iban a poder vivir finalmente o no.
Me pone muy feliz verlos ahí parados, disfrutando por fin de todo lo que se merecen. Y hoy quiero decirles «gracias» por seguir siendo siempre ejemplo del amor más puro. Los amo.»
@vickylenza
@hernancitofco
Inés María Agosta 