«Con este libro intentamos dejar nuestro granito de arena para la construcción de un mundo mejor, más pacífico, solidario, consciente y saludable. Es nuestra esperanza que a través de estas páginas hayan incorporado una mirada sobre la salud holística y podido tomar a la reflexología como un instrumento para ir en su búsqueda». Así terminan las autoras el libro. Así empiezo yo esta reseña, porque me pareció la síntesis perfecta de todo lo que ellas transmiten.
Me acerqué a la reflexología en el 2017, en pleno deseo de ser mamá y después de haber perdido un bebé, y en el medio de la gran incertidumbre que significó la necesidad de Mamá de un nuevo corazón. Durante ese año y los primeros meses que siguieron después de haber tenido a Joaco, el acompañamiento de Cristina fue clave para mí. Nada me ayudó tanto a mantenerme en equilibrio y a disfrutar, lo mejor posible, de cada etapa del embarazo como ella. Tuve un impasse (nació Rafa, pandemia, mudanza) y ahora pude recuperar el espacio de tener unas manos mágicas cerca de mi nueva casa.
Si antes creía que la reflexología tenía que ser obligatoria para todo ser humano, después de haber leído este libro estoy todavía más convencida. «Salud holística…» está destinado a toda persona que se interese por la reflexología, tanto el consultante (el que la recibe) como el reflexólogo (el que la da). La clara explicación de cada parte del proceso, de cómo nació, de la finalidad que tiene, de cómo es el ser humano, de cómo este tipo de terapia ayuda a determinadas cosas, se enriquece todavía más con las ilustraciones de Sofía Martina. El mapa de los puntos reflejos en el pie se puede encontrar por cualquier lado en internet. Pero el paso a paso de la sesión de autotratamiento de pies para el reequilibrio integral, les juro que es único. Así como un montón de otra información que aportan las autoras. Siento que al haberme cruzado con este libro puedo darle todavía más peso y entidad al lugar que quiero que la reflexología ocupe en mi vida.
¿Ustedes conocen la reflexología? ¿Conocían este libro? Los leo.
Inés María Agosta 