¿Se acuerdan de la época en la que estuvo en auge hacer remakes de sitcoms yanquis con producción y elenco de Argentina? Flor Peña a la cabeza, primero en La Niñera, después Casados con hijos y por último Hechizada. De las tres la que más éxito tuvo fue Casados con hijos pero más en su retransmisión (cuando en Telefé ponían un episodio atrás de otro) que en su estreno. Guillermo Francella, los hermanos Lopilato y Flor Peña interpretaron LA familia argentina que hacía reír a todos. Pero hoy quiero decirles: esa sitcom y la sitcom original tienen poco que ver.
¿Por qué digo esto? Principalmente porque Pepe Argento y Al Bundy, los padres de las dos versiones, son muy distintos. Lo único que los une es que están hartos de sus familias básicamente. Pero Pepe tiene ese brillo en los ojos de Francella, lleno de vida y de euforia, mientras que la imagen paradigmática de Al es la que se ve en la presentación: sentado en el sillón del living, viendo la televisión y repartiéndole plata a toda su familia sin el menor atisbo de entusiasmo hacia nada. Esta es solo una de las tantas diferencias que noto entre ambas versiones pero creo que es la más significativa.
Pienso que igual como producto audiovisual funcionó perfecto porque tuvo mucho éxito. Pero creo que no debería llamarse «remake de», en mi opinión, porque si algo tenía de gracioso Al es que no era nada simpático. En cambio «simpatía» y Francella van prácticamente de la mano. Como perlita creo que la reivindicación de Ed O’Neill como un mejor padre de familia es en su interpretación de Jay Pritchett en Modern Family. Ahí es todo lo dulce, émpata y simpático que no fue en «Married…».
Inés María Agosta 