Saben que me encanta este género de comedia televisiva («situation comedy», «sitcom») porque, de hecho, le estoy dedicando esta sección todos los viernes. Pero, aunque no lo crean, hay algunas sitcoms que no trago con nada. Creo que en gran parte es porque las actuaciones me parecen muy malas pero también le echo un poco la culpa al guión. Quiero advertirles que cuando algo no me gusta puedo ser muy «filosa» como dice Seba.
1. Encabeza esta lista «2 Broke Girls» 🙄. A Max (la morocha) no le creo nada. El típico personaje enojado con la vida que de golpe descubre que puede entablar amistad con alguien. Esos personajes pueden ser muy profundos, pero cuando los interpretan personas tan parcas pasan a ser directamente troncos. Cuéntenme que otros personajes así se les vienen a la cabeza (a mí todos los Indiana Jones por ejemplo 🤣). Tampoco soy fan de Caroline, la otra «girl», pero creo que quizás si tuviera otra compañera me molestaría menos la serie.
2. «Mom». Quizás porque el mundo de los alcohólicos anónimos no es con el que puedo tener más empatía, o quizás porque la figura de la mamá abandónica, más preocupada por alimentar su vanidad que por cuidar a los demás me enoja mucho, pero el hecho es que «Mom» me pone muy nerviosa. Y eso que Anna Faris, la protagonista, como actriz me cae bien. Es la que les permitió a Chandler y a Mónica de Friends ser papás dándoles en adopción a sus bebés y siempre creí que eso que dejaron picando los guionistas, que ella y Joey podrían hacer buena pareja, era verdad. El rol de «tonta» ya lo tenía asumido desde la saga de Scary Movie. En «Mom» puede ser muy dulce e ingenua pero también siempre algo le sale mal y la combinación de eso con el personaje de la madre de ella, Bonnie, no me gusta para nada 🤷♀️ Tengo que admitir que las veces que viajé en avión y daban algún capítulo de esta serie, después de ver los de Friends, los veía 🙈 Pero nada bueno salió de eso.
3. Y por último «Pretty Smart». Me dio mucha pena que no me gustara. Me divierte ver series en las que los protagonistas son escritores. Pero es tan de manual que uno puede ver los hilos de las marionetas: los personajes son muy clichés y acartonados, los conflictos son predecibles y los desenlaces más todavía. La química entre Chelsea y Grant incomoda y la risa te la debo.
Cuando una sitcom es buena, es una joya. Cuando es mala, puede ser muy molesta e imposible de ver. Creo que es peor que un drama «medio pelo» porque encima se espera que te rias de cosas que no te causan nada de gracia. Y sin risa, no hay sitcom. Ahora entenderán el trabajo difícil que estoy haciendo escribiendo la mía 😱 Ojalá por lo menos los haga reír.
¿Y ustedes qué opinan de estas 3 sitcoms? ¿Cuáles otras no les gusta para nada? Los leo 💜.
Inés María Agosta 