
No entiendo cómo, teniendo 34 años y habiendo estudiado Letras, nunca antes había leído este libro. Sin dudas esta novela tan completa debería ser lectura obligatoria del colegio. Tengo que admitir que cuando estudié literatura gauchesca en la secundaria me encantó. Siempre pienso que mi puntapié para estudiar Letras fue la Literatura Italiana y la gran profesora que tuvimos, pero creo que la gauchesca puso su semillita también. Sé que para quienes practican profesiones alejadas de las Letras, leer en el medio de los trajines de su día este tipo de obras se puede hacer un poco pesado. Por eso me parece una lástima que no lo leamos en esa época en que nuestro tiempo se lo dedicamos a nuestra formación.
Lucio Mansilla es un nombre muchísimo más conocido. Es el hermano de Eduarda, autor de «Excursión a los indios ranqueles», obra que sí se considera un clásico de nuestra literatura, y traductor de «Pablo…» al español. Pero «Pablo…» es tan completa desde tantos puntos de vista que asusta que sea tan ignota. Eduarda escribió el original en francés en 1868 y se publicó por entregas en un diario de París, donde por ese entonces vivía ella. Fue en 1870 que comenzó a publicarse, también por entregas, en «La Tribuna» de nuestro suelo.
Su formato original sin dudas influye en la narrativa, ya que una de las cosas que más me gustó de la obra es el uso del cliffhanger: ese momento de suspenso al final del capítulo que te deja enganchado como para querer seguir leyendo el que sigue. Pero, además del saber dejarnos con la intriga, la forma en que es contada la historia es tan ágil que no parece tener más de 150 años. Cada capítulo nos da información sobre los distintos personajes mientras sigue avanzando la historia. Además hay recursos como contar algo terrible a través de una conversación de otros dos, y no describiéndola directamente, que me parecieron brillantes. Además de los gauchos y todo su entorno, la naturaleza es otra protagonista indiscutida. Es una historia de amor en la que se entremezclan cuestiones políticas y culturales, como en casi toda la literatura argentina. Además de la ya sabida dicotomía entre civilización y barbarie, se nota el conocimiento del pensamiento europeo que tiene la autora que hace que también permanentemente se compare lo nuestro con lo de allá.
Pero con lo que más me quedo, más allá de la historia, es con las descripciones hermosas que hace de La Pampa y las metáforas que usa para presentar a su flora y a su fauna. También, como está pensado para un lector que no es de acá, explica cosas básicas para nosotros que está buenísimo recordarlas como la tradición del mate, de la doma, las vestimentas, la importancia de la pulpería para el gaucho, la religión, etc.
La autora no puede con su genio y no se mantiene objetiva. De hecho por momentos le habla al lector comentándole lo que debe recordar para recapitular la historia.
Recogí muchas citas hermosas de metáforas increíblemente profundas. A diferencia de otros libros que reseñé y que me encantaron, entiendo que este no es completamente «apto para todo público» porque es una temática y un tipo de escritura muy específico. Pero si querés conectarte con nuestras tradiciones y reivindicar el trabajo formidable de esta autora, te recomiendo que te tomes un rato para leerla. Lo único que no me gustó fue la edición (Bliblioteca Nacional, Ediciones Colihue) porque se me desarmó todo el libro solo de dar vueltas las páginas y creo que eso y que me lo mojen son las peores cosas que me podés hacer.
Pero aunque me hubiera gustado haberlo leído antes, como siempre digo los libros nos eligen en determinados momentos. En el 2018, husmeando en la gran biblioteca de la casa de mis papás, descubrí un libro que me llamó la atención «Una mujer de fin de siglo» de María Rosa Lojo. Si bien el libro me encantó, en ese momento no me percaté de que podría ir a la fuente. Y es que esa novela tiene como protagonista a la mismísima Eduarda Mansilla. Unas semanas atrás «Pablo…» llamó mi atención gracias a un post de ser mulanas. Y fue esa misma cuenta la que me hizo conectar con el libro que tanto me había gustado años atrás. Y esta historia de libros entrelazados no termina acá: hace poco me compré «Así los trata la muerte» el nuevo libro de María Rosa Lojo en el que también está presente Eduarda. De más está decirles que ya estoy ansiosa por leerlo.
¿Y por qué creo que «Pablo…» me eligió en este momento? Porque va a haber algo de él en la novela que estoy escribiendo 🤭🥰
Me encantó. Gracias
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