Este es, sin dudas, uno de los mejores libros que leí en mi vida. Venía leyendo artículos que Maritchu publicaba en distintos medios pero siempre me quedaba con ganas de saber más. Me encantaba lo que decía (y cómo lo decía) pero tenía muchas otras preguntas dando vueltas en mi cabeza. Por eso recurrí a este libro.
Desde el principio sentí que estaba escrito a mi medida, lo cual es muy difícil en un tema tan complejo como lo es la crianza de los hijos. Creo que hay en esta época una falsa sensación de libertad en cuanto a cómo criarlos. No es cierto que cada uno ahora puede hacer lo que quiera; puede, pero hay tantos fundamentalismos dando vueltas que siempre te encontrás con alguna mirada crítica.
El libro de Maritchu, en cambio, te va guiando en todos los temas que pueden interesarte sobre cómo criar a un hijo desde que nace hasta los 6 años sin dejar de transmitirte confianza. Los ejemplos son muy claros y la teoría tiene mucho sentido. Me hizo reflexionar mucho, no solo sobre los temas concretos que toca sino también sobre aspectos psicológicos en general.
Esta frase que elegí puede dar vértigi, y claro que el vértigo existe, porque nadie puede pensar que la incidencia de uno sobre sus hijos es nula. Pero justamente como es un compromiso tan importante es mucho mejor hacerlo a conciencia, teniendo una guía de qué les hace bien a los chicos y qué no.
Confianza y disfrute. Destaco del libro estos dos conceptos. Con el segundo especialmente me siento muy identificada: siempre pienso lo importante que es sobreponerse a la exigencia física de tener chicos chiquitos para poder realmente pasar tiempo de calidad con ellos y disfrutarlos. Ver que Maritchu piensa igual me acercó mucho a todo el resto de la teoría del libro.
Como frutillita, al citar a Kübler Ross, la autora hace referencia a cómo se puede explicar a los chicos la muerte comparándola con el proceso de transformación de una oruga en mariposa. Sí, en mis queridas mariposas que tan presentes están en mí y en mi libro. Pasá por mis historias que te muestro el párrafo completo 🤗
No quiero ser una fundamentalista más. Pero desde mi humilde lugar solo quiero decir que ojalá todos los hijos tengan padres que hayan leído este libro tan pero tan rico.
Inés María Agosta 